Este invierno, si algo nos ha dejado son varias estampas navideñas, con nieve y temperaturas gélidas. Según vamos cumpliendo años, somos más vulnerables a los cambios bruscos y a las temperaturas extremas. Las personas que tienen una edad avanzada, y que tienen algun problema de salud subyacente, pueden verse afectados por el frío, por eso hay que tomar determinadas medidas.
Los ancianos, o personas que superan los 75 años, presentan cierta indefensión frente a los cambios acusados de temperatura. Esto es debido a que el calor se pierde con mucha facilidad y resulta más complicado generarlo. Hay determinadas enfermedades que se ven agravadas por el frío, como puede ser las relacionadas con el aparato respiratorio y la circulación sanguínea. Las bajas temperaturas provocan vasoconstricción sanguínea, y ello relantiza el flujo sanguíneo, por lo que aumentan las probabilidades de sufrir accidentes cerebro vasculares.
No obstante, uno de los principales problemas del frío y que conlleva graves consecuencias es la hipotermia. La sintomatología va desde piel fría, letargia y dificultad para realizar los movimientos habituales.
Consejos para las bajas temperaturas
Desde Grupo Lekuona, y con dilatada experiencia en el trato y cuidado con la tercera edad en nuestra residencia de ancianos en bilbao, os dejamos las siguientes recomendaciones para afrontar mejor el invierno:
Buena alimentación: El hecho de tener una dieta adecuada y ligeramente hipercalórica ayudará a que los ancianos sobrelleven mejor las bajas temperaturas. Por ejemplo, incrementando la ingesta de hidratos de carbono (pasta, legumbres, arroz) y las proteínas (carnes o pescados azules). La ingesta de líquidos ya sea a modo de infusión o zumos naturales, ayudará a mantener una correcta hidratación y a aprovechar la vitamina C que aportan las frutas.
A parte de la alimentación, el calzado debe ser adecuado para las condiciones exteriores. El objetivo principal es evitar las caídas, que con esta climatología de nieve y heladas, es muy fácil resbalar. Por eso, un calzado antideslizante y resistente al agua es la mejor opción. A pesar de que es muy importante realizar actividades a lo largo del año, es cierto que los días de frío, es mejor salir durante las horas de luz.
Otro de los factores, sería la ropa. Utilizar buena ropa de abrigo y que sea cómoda es esencial para enfrentarse al frío invierno. Las prendas deben ser ligeras, para poder quitar con facilidad, pero que abriguen. Además es muy importante utilizar complementos como bufandas, gorros y guantes para proteger las partes del cuerpo que quedan expuestas al frío y que muchas veces no tenemos tanto en cuenta.
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